Adicción al sexo y a la pornografía
La conducta sexual compulsiva o Adición al Sexo, se refiere a un patrón persistente de falta de control de impulsos o impulsos sexuales intensos y repetitivos, lo que resulta en un comportamiento sexual repetitivo durante un período prolongado (6 meses o más) que causa una angustia marcada o deterioro personal, familiar, social, educativo, ocupacional, u otras áreas importantes de funcionamiento diario de la persona.
La Adicción al Sexo o Conducta Sexual Compulsiva puede incluir una variedad de experiencias sexuales que aparentemente parecen normales o que se han normalizado como comportamientos lícitos en la sociedad y que podemos clasificarlos como ejemplo: en la masturbación, el cibersexo, múltiples parejas sexuales, el consumo de pornografía o pagar por sexo. Ahora bien, se debe tener en cuenta, que cuando estas conductas sexuales se transforman en un elemento esencial de la vida, son difíciles de controlar y son disruptivas o perjudiciales para la persona o para los demás, entonces pasamos a catalogarlas como conductas sexuales compulsivas o comportamientos de Adicción al Sexo.
Se debe tener en cuenta que una de las principales características de la conducta sexual compulsiva o Adicción al Sexo, es la falta de control sobre los impulsos sexuales. Las personas que la experimenta pueden sentir una intensa necesidad de buscar gratificación sexual de manera repetitiva (como si fuera una droga psicoactiva), incluso a pesar de las consecuencias negativas que esto pueda acarrear. Estas consecuencias pueden incluir problemas en las relaciones interpersonales, deterioro en el rendimiento académico o laboral, sentimientos de culpa y vergüenza, ansiedad, depresión y otros comportamientos negativos que puede ir desarrollando la persona.
La Adicción al Sexo o la Conducta Sexual Compulsiva, marcan una diferencia importante de la actividad sexual saludable y normal, debido a su naturaleza desadaptativa y la incapacidad del individuo para controlar sus impulsos sexuales; ya que las personas que experimentan esta conducta, tienden a tener una obsesión por el sexo o por sus formas de sexo y pueden verse inmersas en patrones de comportamiento sexual autodestructivos.
SINTOMATOLOGIA DE UNA PERSONA ADICTA AL SEXO
- Fracaso persistente en resistirse al impulso de llevar a cabo una conducta sexual.
- Frecuentemente dedica a la conducta sexual más tiempo del previsto o de forma más intensa de la deseada.
- Deseo persistente y esfuerzos infructuosos para parar, reducir o controlar los comportamientos sexuales.
- Dedicación de un enorme gasto de tiempo para obtener la conducta sexual, para dedicarse a ella o para recuperarse de ella.
- Preocupación por la conducta sexual o las actividades rituales previas.
- Frecuentemente participa en conductas sexuales cuando debería atender obligaciones laborales, académicas, domésticas o sociales.
- Continúa con su conducta sexual a pesar de que es consciente de tener un problema social, económico, psicológico o físico causado o aumentado por la conducta sexual.
- Necesita aumentar la intensidad, frecuencia, número de veces seguidas o riesgo de la conducta sexual para conseguir el efecto deseado, o disminuye el efecto de tal conducta cuando se realiza con el mismo nivel de intensidad, frecuencia, número de veces seguidas y riesgo.
- Abandona o limita sus actividades sociales, laborales o de ocio por culpa de la conducta sexual.
- Presenta malestar, ansiedad, inquietud o irritabilidad si no puede llevar a cabo la conducta sexual.
CAUSAS PARA DESARROLLAR LA ADICCION AL SEXO/CONDUTA SEXUAL COMPULSIVA
Un desequilibrio de las sustancias químicas naturales del cerebro.
Ciertas sustancias químicas del cerebro (neurotransmisores), como la serotonina, la dopamina y la norepinefrina, ayudan a regular el estado de ánimo. Estos niveles elevados están relacionados con la Adicción o conducta sexual compulsiva.
Cambios en las vías cerebrales
La conducta sexual compulsiva es una adicción que, con el paso del tiempo, podría provocar cambios en los circuitos neuronales del cerebro, especialmente en los centros de refuerzo del cerebro. Como ocurre con otras adicciones, con el tiempo, se suele necesitar contenido y estimulación sexuales más intensivos para obtener satisfacción o alivio.
Trastornos que afectan el cerebro.
Ciertas enfermedades o problemas de salud, como la epilepsia y la demencia, pueden provocar daños a las partes del cerebro que controlan la conducta sexual. Además, el tratamiento de la enfermedad de Parkinson con algunos medicamentos agonistas de dopamina puede provocar conducta sexual compulsiva.
Mecanismos de afrontamiento de ansiedad
y no por deseos sexuales; las personas pueden tener relaciones sexuales compulsivas para disminuir la sensación de ansiedad que puede causar la soledad.